Una victoria histórica para Soraya Martínez Ferrada
Soraya Martínez Ferrada fue elegida alcaldesa de Montreal con el 44,6 % de los votos, superando a Luc Rabouin de Projet Montréal que obtuvo el 34,7 %. Con más de 165 000 votos contados y su partido Ensemble Montréal liderando en 39 de los 65 escaños, aseguró una mayoría sólida en el consejo de la segunda ciudad más importante de Canadá.
La noche del 2 de noviembre, el ambiente en el Tohu fue de euforia. Entre aplausos y banderas, Soraya Martínez Ferrada agradeció a sus seguidores y prometió gobernar con eficiencia, vivienda asequible y oportunidades para todos los habitantes de Montreal.
De refugiada chilena a líder municipal
Soraya Martínez Ferrada nació en Santiago de Chile en 1972. A los ocho años llegó a Canadá junto a su familia, que escapó de la dictadura de Augusto Pinochet. Se establecieron en el este de Montreal, donde aprendió francés y comenzó una vida nueva marcada por la resiliencia y el esfuerzo.
Estudió en HEC Montréal, obtuvo una maestría en gestión y trabajó con organizaciones comunitarias dedicadas al apoyo de inmigrantes. Su compromiso social fue la base de su carrera política.
Trayectoria y ascenso político
En 2005 fue elegida concejala de Saint-Michel. Luego, en 2019, Soraya Martínez Ferrada llegó al Parlamento como diputada por Hochelaga. Durante el gobierno de Justin Trudeau fue ministra de Turismo y responsable de la Agencia de Desarrollo Económico para las Regiones de Quebec.
En 2025 asumió el liderazgo de Ensemble Montréal y presentó una campaña enfocada en recuperar la confianza ciudadana, priorizando resultados concretos y una administración transparente.
Propuestas para una nueva etapa
- Crear un grupo de intervención táctica para atender la crisis de vivienda.
- Registrar edificios y terrenos vacantes con fines sociales.
- Revisar la movilidad y el transporte público.
- Optimizar la limpieza y gestión urbana.
- Ejecutar un plan de 100 días con medidas visibles.
Un símbolo para la comunidad latina
El triunfo de Soraya Martínez Ferrada es un hito para los latinoamericanos en Canadá. De niña refugiada a alcaldesa de una de las ciudades más influyentes del país, su historia refleja superación y liderazgo femenino. Su victoria envía un mensaje poderoso sobre integración, diversidad y representación real.
