SAN FRANCISCO.- «Yo quedé traumatizado, eso parecía diabólico», así describe un seguridad del edificio donde una mujer se cortó el cuello momentos después de esta agredir a su hija creyendo que la había matado, en un hecho ocurrido en la puerta de un residencial en la urbanización Caperuza II, en San Francisco de Macorís.
El vigilante identificado como Leonardo Casso, dijo que las mujeres llegaron al lugar en un taxi de la plataforma Uber en busca de un hombre, y tras varios minutos de conversación con ellas, este notó que parecían estar bajo los efectos del alcohol, ya que iniciaron una discusión que terminó en agresión tras la mujer de 33 años cortar con un caso de botella a su hija de 20 y posteriormente cortarse el cuello con el mismo objeto.