REDACCIÓN.- En un mundo cada vez más digital, donde las transacciones en efectivo son cada vez más raras, una iglesia ha generado gran polémica al permitir que los feligreses ofrezcan su limosna mediante tarjeta de crédito o débito.
Durante las misas, cuando tradicionalmente los asistentes pueden hacer sus donativos, ahora se presenta la opción de contribuir sin necesidad de dinero en efectivo, utilizando únicamente sus tarjetas.
Esta medida ha dividido opiniones en las redes sociales, con algunos considerándola una adaptación necesaria a la era moderna, mientras que otros la ven como una desviación de las costumbres tradicionales de la iglesia.