Uncategorized
Una sociedad en completa decadencia
La sociedad norteamericana, que hasta hace algunos años se nos vendia como el modelo a seguir y a emular por las demás naciones del mundo, por el respeto a la institucionalidad, a la democracia, a los derechos hunanos, a los valores y principios éticos y morales, hoy ha entrado vertiginosamente en una total decadencia y descomposición moral.
¿Cómo podemos promover, emular y aceptar como referencia y como paradigma a una sociedad que promueve los antivalores, la doble moral; que promueve la división social, la discriminación racial y de género; que quiere exigir a las demás naciones a respetar los derechos humanos y a cumplir con lo que ella no cumple? Esa nación quiere prohibir que los demás países apliquen sus leyes migratorias, pero ella sí puede aplicar la suya, como es el caso de la República Dominicana.
Mientras ese país incluye injustamente a Cuba en la lista de los países terroristas, promueve la venta de armas a distintos países y amenaza con invadir a otros pequeños, propiciando golpes de Estado, como el que perpetró contra el gobierno legítimo, constitucional y democrático del Presidente Juan Bosch, el 25 de septiembre de 1963.
¿Cómo esa sociedad es capaz de elegir como presidente de la república a una persona que había sido condenada por varios cargos judiciales, que ya les fueron eliminados los mismos, adquiriendo la categoría de honorable; una persona que es capaz de desconocer la institucionalidad democrática y la propia constitución de
su pais; que persigue, condena, bloquea, que mantiene una actitud insultante y amenazante a los países pequeños y aliados?
Mientras habla de paz, es uno de los principales accionistas de la industria armamentista, promoviendo la venta de armamentos y equipos bélicos.
Anenazas
En estos momentos, el presidente Donald Trump está amenazando con apoderarse del Canal de Panamá, el cual fue ocupado por los Estados Unidos por espacio de cien años, y que por el Tratado Torrijos-Carter, le fue devuelto a Panamá; está gestionando convertir a la República de Canadá en el Estado número 51 de Estados Unidos.
Se quiere apoderar por la fuerza de la Isla de Groenlandia, la más grande del mundo, rica en minerales y petróleo; también, que el Golfo de México, rico en yacimientos petroleros, pase a formar parte de los Estados Unidos, como Golfo de América.
Todo esto forma parte de una agenda totalmente imperialista, correspondiente al siglo XIX, que no se d permitir. Con esta forma y estilo de gobernar, el Presidente Trump contribuye a acelerar la decadencia de esa gran nación, pues en vez de aliados, logrará más adversarios políticos y económicos.
La diplomacia debe ser de doble vía. Un conflicto de intereses entre naciones debe ser resuelto a través de una negociación entre las partes afectadas. Una verdadera negociación diplomática amerita aplicar el concepto de ganar-ganar, esto es, que ambos países se sientan satisfechos, que uno no se quiera imponer sobre el otro, ya que esto no seria una negociación, sino, una imposición.
En esto consisite el principio de reciprocidad. Ningún país, por más poder económico y político que ostente, debe tratar de avasallar ni imponer su ejemonía sobre los más pequeños, pues todos tienen los mismos derechos adquiridos internacionalmente, y en política, toda acción provoca una reacción.
jpm-am
Compártelo en tus redes:
ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.