Santo Domingo.- El juez Rigoberto Sena, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente, impuso arresto domiciliario a diez de los imputados en la red de sobornos desmantelada mediante la Operación Lobo, que habría defraudado al Estado por más de 108 millones de pesos. A tres de ellos también se les impuso impedimento de salida del país como medida adicional.
El director general de Persecución del Ministerio Público, Wilson Camacho, no descartó la posibilidad de que se realice una segunda fase del caso, a la que se refirió como «Operación Lobo 2.0».